El título de esta entrada es más
o menos la frase que tuvo que ir de boca en boca antes de que nosotros mismos
pudiéramos contarlo, pero vamos a empezar por el principio.
Tras la pedida yo estaba
emocionada, muy emocionada. Y tenía un móvil en las manos, un móvil con
internet. Emoción y tecnología ponían a mis pies un mundo cibernético genial
para comunicarme. Quise serenarme y elegir bien a quién contarle la gran
noticia… mi familia tendría que esperar, lo suyo era contárselo en persona,
pensaba en una cena, no, mejor una fiesta… Bueno el caso es que decidí que mi
mejor amiga sería la primera en saberlo, sólo ella, claro.
Se lo dije por medio de un
whatsApp con foto del anillo incluida y adivináis?. No estaba sola, sino con
toooda la pandilla de amigos y como la emoción debe ser capaz de transmitirse
por las ondas, ella también se emocionó y se lo enseñó a todos. Cuando tras
unos minutos le comenté que de momento no dijera nada me confesó que ya era
demasiado tarde, así que mis amigos fueron los primeros en enterarse.
Aunque entonces hubiera matado a
mi amiga, ahora me alegro, era una buena noticia y así ya estaban todos
avisados. Aún nos quedaban un par de días en la playa hasta volver a casa, así
que decidí aguantar… pero no pude, se lo conté también a mi sobrina mayor que
es una especie de hermana pequeña con la que suelo confesarme. Ella guardó el
secreto como una campeona… pero yo no tuve más remedio que contárselo a su
madre, mi hermana, era una noticia demasiado heavy como para hacer de ella un
secreto.
Cuando llegamos a Madrid
decidimos visitar a mis padres que pasaban unos días en el pueblo y allí se lo
conté a mi hermana, quien emocionada no me dejó ni a mi misma contárselo a mi
madre… La verdad es que la noticia la debió de pillar en estado de “ni frío, ni
calor” porque tardó unos días en reaccionar y empezar a ilusionarse.
Después la gran noticia tenía que
llegar a la familia del novio… pensamos en contárselo primero sólo a sus
hermanos, así que pensamos en organizar más adelante una cena para todos
nuestros amigos y entonces darles la gran noticia; pero nada más lejos de la
realidad… Antes de irnos se lo contamos a una de las cuñadas del novio y…
tachán tachán, radiomacuto se puso en acción y se encargó de contárselo a la
madre de una de nuestras amigas, la que por supuesto debió de decirle al resto:
Sabes?... Sandra y Óscar se casan.
Así fue como se enteró la mayoría
de la gente de nuestra Boda, después hubo muchas llamadas de teléfono, e-mails,
sms, whatsApp y un largo etcétera de modos para contárselo a todos nuestros
amigos que no veíamos habitualmente.
Ya sabéis que las noticias
importantes no pueden planearse porque simplemente se extienden como la espuma.
Independientemente que nuestra
noticia rodara sin control, hay muchas formas para que podáis dar la gran
noticia de maneras muy originales, vamos a daros unas cuantas sugerencias para
que os inspiréis si queréis hacerlo de una manera especial:
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La idea de dar una noticia tan dulce, como que
os casáis, puede precisamente hacerse sobre algo muy dulce. Así lo hicieron una
de nuestras parejas y sin duda fue un éxito. Reunieron a toda la familia para
una comida y en el momento del postre, la tarta traía la gran sorpresa “Nos
casamos”.
-
Para los más atrevidos está el video, si os
apetece podéis grabar un video con una canción marchosa o directamente con
letra inventada por vosotros y hacérselo llegar a vuestros familiares y amigos
mediante e-mail, WhatssApp…
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Si preferís hacerlo de una manera un tanto
sublime, podéis hacerlo cambiando el estado de vuestro perfil en las redes
sociales a “comprometid@”, lo bueno o malo de esto, es que puede enterarse
gente a la que no querías decírselo o que puedes haberte olvidado de contárselo
a alguien de modo más personal y si se entera por este medio quizá no sea lo
mejor.
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Sin duda una de mis maneras preferidas para
contárselo a vuestras amigas más íntimas es enviarles la foto del anillo, si es
que lo hay claro… Me encanta recibir en mi móvil fotos de los anillos de mis
amigas, en esas fotos se palpa la ilusión y la emoción que a veces se evapora
cuando empiezas a comunicar la noticia.
Lo hagáis como lo hagáis, no
esperéis que vuestra noticia emocione a todo el mundo como vosotros pretendéis,
suele emocionarlos pero a veces las reacciones son incontrolables y seguro que
si no son muy emocionantes al principio lo serán cuando asuman la gran noticia,
de que os casáis.